martes, 14 de junio de 2011

EL NIVEL DE LOS LIBROS DE TEXTO Y DE LOS PROFESORES

Estoy dándole clases particulares de Latín a un alumno de 4º de la ESO que estudia en un colegio privado. En su libro de texto, de la Editorial Santillana, se habla de Julio César y, cómo no, al llegar a su famosa frase Llegué, vi, vencí, los autores perpetran la metedura de pata de rigor: Vini, vidi, vici. Le explico al alumno que el pretérito perfecto de venire "llegar" no es vini, sino veni. Le animo a que lo busque en las fuentes, para que vea que llevo razón. En el examen, la profesora, eminente filóloga, como era de esperar, repite el error de latín macarrónico (que no errata), y el alumno, con toda su buena intención, le explica que "existe una teoría según la cual no es vini sino veni". Naturalmente, ella, ni corta ni perezosa, se lo tacha.